¿JUGUETES TECNOLÓGICOS FRENTE JUGUETES CONVENCIONALES?

Hace un mes, en las noticias del canal televisivo del metro de Barcelona, podíamos ver como se informaba que el pequeño y mediano comercio de juguetes había tenido pérdidas porque habían bajado las ventas, y esto era debido al incremento de ventas de juguetes tecnológicos.Con esta noticia, que ven millones de personas cada día, de alguna manera se mostraba una queja a aquello en que la modernidad rompe con todo lo tradicional o convencional.Seguramente es verdad, las cartas de los reyes ya no se llenan sólo de muñecos y juegos de mesa, sino de consolas, sean portátiles o de mesa, con comandos que te hacen mover o con los que juegas sentado, el ordenador con las posibilidades de internet y la webcam, los mp3 y los mp4, las cámaras digitales… puede ser que el juego tradicional haya quedado relegado a otro nivel, o a otro momento en la edad de los chicos y las chicas.Esta es la cultura de nuestros jóvenes, hay quien describe este momento tecnológico y audiovisual como pantallas. Antes era la televisión la pantalla por excelencia, en cambio ahora son muchas las que los chicos y las chicas tienen al alcance, y es necesario que reflexionemos sobre cuál es el uso que hacen nuestros hijos o nuestros alumnos, así como ver cuáles son las posibilidades que nos ofrecen y cómo las podemos utilizar a nivel social e incluso didáctico.Estos nuevos medios son a menudo criticados, no sólo en la vertiente mercantil (por la pérdida económica de un sector como es el mundo de los juguetes convencionales), sino porque se dice con frecuencia, que fomentan la individualidad.Yo discrepo totalmente. De entrada, podemos ver como muchos de los juegos de mesa han editado el clásico juego pero con el apoyo de la pantalla, un DVD donde a parte de explicar las instrucciones, los jugadores han de apretar un botón de comando de la televisión para continuar el juego… aquí tenemos el juego de mesa convencional actualizado del todo en el momento actual.Por lo que respecta a la individualización de los niños, de entrada los niños se comunican cuando juegan, intercambian los juegos de sus consolas, juegan juntos porque pueden hacer partidas colectivas, a través del ordenador se conectan y hablan… e incluso Manel Castells, sociólogo de profesión, afirma que quien chatea es más sociable.Tiene peligros, por supuesto, pero si los niños y niñas se enganchan, no es por la tecnología en sí, sino por como los adultos nos situamos frente a ella.Si hemos dejado que jueguen cuando han querido, que hayan escogido el juego que han deseado sin reflexionar si es el apropiado o no, si no hemos pactado las horas ni los días que pueden jugar… es entonces cuando se pierde el valor didáctico que tienen las pantallas: el hablar, el reflexionar, el pactar y el saber escoger… si educamos a nuestros jóvenes en estos valores en esta línea y con esta percepción, los juguetes tecnológicos serán siempre sociales.